Amazon: Las claves de su éxito


La compañía no parece dar mucha importancia a las fluctuaciones del precio de sus acciones y prioriza las estrategias de crecimiento sostenido en el tiempo.
Amazon es una de las empresas que más ha prosperado en los últimos años. De hecho, desde su creación a mediados de los 90 su crecimiento ha sido exponencial. Además, se ha convertido en el mayor comercio minorista del mundo y es, por tanto, vista como una oportunidad de inversión muy jugosa; no solo para inversores, si no también para los llamados traders
Los primeros encuentran un gran atractivo en la estrategia de negocio a largo plazo de Amazon, que reinvierte beneficios en infraestructura y permite que esta empresa esté siempre a la vanguardia, por delante de sus competidores. 
Sin embargo, sus valores a corto plazo suelen fluctuar mucho y esto la hace también muy atractiva para quienes usan este tipo de estrategias basadas en transacciones de alto riesgo y ganancia rápida. 
Más allá del clásico cliché del “negocio millonario que empezó en un garaje”, lo cierto es que Jeff Bezos, fundador de Amazon, ya gozaba de una carrera previa en el mundo de los negocios, incluyendo Wall Street. 
Tenía experiencia, y este es uno de los puntos principales que le alejan de la típica fábula ambientada en Silicon Valley, donde un jovencito con un sueño empieza a trabajar en su idea hasta hacerla realidad a toda costa y con maravillosas consecuencias. Jeff Bezos tenía un plan de negocio y había estudiado el mercado. No trataba de “hacer el mundo un lugar mejor” como suelen vender otros gurús de las tecnológicas. Quería construir algo sólido y para ello, después de ver la oportunidad de negocio del e-commerce cuando Internet era aún, en esos términos, tierra virgen; Bezos se dedicó a investigar qué tipo de producto sería más rentable vender de esa forma. Escogió los libros por su alta demanda y por ser un producto fácil de entregar por correo sin estropearlo. Además tuvo cuidado de hacer su web intuitiva y fácil de manejar para el usuario medio. 
Su modelo de venta de libros presentaba una clara ventaja frente a sus competidores inmediatos: las librerías tradicionales. Amazon podía permitirse ofrecer un catálogo de libros mucho más amplio, incluyendo aquellos cuya venta no sería rentable en esos establecimientos. Eso favoreció el boca a boca entre los amantes de los libros, su público objetivo. 
Sin embargo, como él mismo dijo en una entrevista  “El factor más importante en cualquier Startup que se convierte en una gran empresa con los años y que no debe olvidarse, es la suerte”. Un detalle que trístemente se omite en todos los relatos de éxito, que animan a lanzarse a toda costa sin medir antes todos los riesgos y tratar de minimizarlos, algo sobre lo que también ha hablado multitud de veces el empresario. 
Amazon fue la pionera en su campo, y eso siempre le ha otorgado una ventaja amplia frente a sus competidores. Sin embargo, todo eso no es lo único que la ha mantenido a flote y la ha ayudado a seguir creciendo. 
Como comentábamos al inicio, Amazon apuesta por el largo plazo. Reinvierte los beneficios en el negocio buscando formas de mejorar su rendimiento y diversificarse. Así, en los últimos años hemos visto cómo pasaba a ser una tienda online que añadia cada vez más productos a su catálogo, a ofrecer servicios en la nube, series online y hasta tiendas físicas de comestibles, más recientemente.  

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